HERBOLARIO
Abierto en pleno corazón de La Alpujarra granadina, ubicado en los mercados municipales de Órgiva y Lanjarón, nace este herbolario “SOY CAPACITADA-SOY CAPACITADO” destinado a la participación de personas con diversidad funcional que sienten la necesidad de sentirse útiles a la sociedad y superar el estigma “tú no vales, tú no sirves” que les marcó desde pequeños.
Ellos y ellas siguen participando, con apoyo, en la recolección, en pleno campo, de plantas aromáticas y medicinales, silvestres, de Sierra Nevada para, después, envasarlas y venderlas. De esta manera, desarrollan sus destrezas manuales, se habitúan a tratar con el público que atienden y se ven capaces de desempeñar un trabajo en el ámbito de una verdadera y real inclusión social.
El progreso experimentado por estas personas respecto a su desarrollo personal, cada cual según sus posibilidades, ha sido espectacular en sus casi tres años de existencia: la persona autista que arranca a hablar interactuando con los/as clientes, la persona con síndrome Down que retoma la lectura y el manejo del dinero vendiendo las plantas, la persona desmotivada con depresión severa que se siente feliz envasando y etiquetando los paquetes de plantas…y, así, otros casos para los que ha merecido la pena montar este herbolario en el que se sienten partícipes en la comunidad a la que pertenecen y en la que desean seguir viviendo.
Por todo ello, deseamos afianzar este bello proyecto que pretende dotar de un puesto digno de trabajo a las personas con diversidad funcional que atendemos.
HERBOLARIO
Abierto en pleno corazón de La Alpujarra granadina, ubicado en los mercados municipales de Órgiva y Lanjarón, nace este herbolario “SOY CAPACITADA-SOY CAPACITADO” destinado a la participación de personas con diversidad funcional que sienten la necesidad de sentirse útiles a la sociedad y superar el estigma “tú no vales, tú no sirves” que les marcó desde pequeños.
Ellos y ellas siguen participando, con apoyo, en la recolección, en pleno campo, de plantas aromáticas y medicinales, silvestres, de Sierra Nevada para, después, envasarlas y venderlas. De esta manera, desarrollan sus destrezas manuales, se habitúan a tratar con el público que atienden y se ven capaces de desempeñar un trabajo en el ámbito de una verdadera y real inclusión social.
El progreso experimentado por estas personas respecto a su desarrollo personal, cada cual según sus posibilidades, ha sido espectacular en sus casi tres años de existencia: la persona autista que arranca a hablar interactuando con los/as clientes, la persona con síndrome Down que retoma la lectura y el manejo del dinero vendiendo las plantas, la persona desmotivada con depresión severa que se siente feliz envasando y etiquetando los paquetes de plantas…y, así, otros casos para los que ha merecido la pena montar este herbolario en el que se sienten partícipes en la comunidad a la que pertenecen y en la que desean seguir viviendo.
Por todo ello, deseamos afianzar este bello proyecto que pretende dotar de un puesto digno de trabajo a las personas con diversidad funcional que atendemos.
HERBOLARIO
Abierto en pleno corazón de La Alpujarra granadina, ubicado en los mercados municipales de Órgiva y Lanjarón, nace este herbolario “SOY CAPACITADA-SOY CAPACITADO” destinado a la participación de personas con diversidad funcional que sienten la necesidad de sentirse útiles a la sociedad y superar el estigma “tú no vales, tú no sirves” que les marcó desde pequeños.
Ellos y ellas siguen participando, con apoyo, en la recolección, en pleno campo, de plantas aromáticas y medicinales, silvestres, de Sierra Nevada para, después, envasarlas y venderlas. De esta manera, desarrollan sus destrezas manuales, se habitúan a tratar con el público que atienden y se ven capaces de desempeñar un trabajo en el ámbito de una verdadera y real inclusión social.
El progreso experimentado por estas personas respecto a su desarrollo personal, cada cual según sus posibilidades, ha sido espectacular en sus casi tres años de existencia: la persona autista que arranca a hablar interactuando con los/as clientes, la persona con síndrome Down que retoma la lectura y el manejo del dinero vendiendo las plantas, la persona desmotivada con depresión severa que se siente feliz envasando y etiquetando los paquetes de plantas…y, así, otros casos para los que ha merecido la pena montar este herbolario en el que se sienten partícipes en la comunidad a la que pertenecen y en la que desean seguir viviendo.
Por todo ello, deseamos afianzar este bello proyecto que pretende dotar de un puesto digno de trabajo a las personas con diversidad funcional que atendemos.